Mary Leakey fue una famosísima antropóloga británica que formó parte de un equipo de arqueólogos que estuvo trabajando a mediados del siglo XX en Kenia y Tanzania. Estos trabajos confirmaban que la aparición del ser humano era más antigua de lo que se pensaba inicialmente. Junto a su marido, Louis Leakey, excavó la garganta de Olduvai donde se descubrieron y estudiaron diferentes tipos de herramientas líticas y fósiles de Australopithecus boisei y de homo habilis, fechados estos últimos entre 1,6 y 1,8 millones de años. Tras su muerte estudió las célebres huellas de Laetoli de 3,6 millones de años.
Debido a la profesión de pintor de su padre, Mary y su familia cambiaban con bastante frecuencia de residencia, llegando a vivir en países como Italia o Francia. Fue en este último país donde surgió su inquietud por la Prehistoria puesto que tuvo la oportunidad de visitar unas excavaciones que dirigía Abbé Amédée Lemozi. Poco después su padre murió y su madre la llevó a un convento católico del que fue expulsada repentinamente. Con los años, siguió formándose acudiendo como oyente a diferentes conferencias en la Universidad de Londres que trataban temas de Arqueología y Geología. Logró abrirse un hueco en este mundo como ilustradora de libros. A través de estos trabajos conoció a su futuro marido, del que ya hemos hablado anteriormente, Louis Leakey.
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